Hoy en día, es fácil encontrar una aplicación para casi cualquier cosa. Pero ¿son siempre necesarias? Una app para tu negocio puede ser una excelente herramienta para mejorar la productividad o el marketing. Hay situaciones en las que una app simplemente reporta unos beneficios extra o mejora la productividad pero también hay otras muchas ocasiones en que puede ser muy necesaria para una empresa.
¿Cómo saber cuando mi negocio necesita una app?
En general, muchas empresas no saben si necesitan una app. Otros tiene claro que no la necesitan porque quizás desconocen su gran potencial. Y luego están los negocios más susceptibles a que una app agilice sus procesos. Estos últimos son los que llevan a cabo alguna de las siguientes actividades:
- Venden productos.
- Ofrecen la contratación de servicios.
- Ofrecen beneficios exclusivos a los usuarios que están registrados.
- Ofrecen el acceso a información o documentos también sin conexión.
- Para realizar su actividad, la empresa necesita geolocalización.
A continuación, se muestran algunos casos más concretos con apps para tareas específicas en un negocio.
¿Qué tipos de apps puede tener un negocio?
App de ámbito interno
Son aquellas apps útiles para quienes trabajan internamente. Por ejemplo:
- Gestionar procesos como reuniones
- Calendarios de trabajo
- Turnos
- Compartir grandes volúmenes de documentos
- Gestión de facturas
- Contratos, etc.
Para algunas cosas, es suficiente mandar correos electrónicos, pero, por ejemplo, la gestión de calendarios puede ser más compleja.
La solución perfecta en estos escenarios podría ser una app que gestionara todos estos procesos de forma automática, sin que una persona tenga que perder el tiempo en hacerlo. Además, se evitarán errores como solapamientos de turnos, cálculos equivocados, etc.
App para reservas y citas
Al igual que con una app de ámbito interno, es posible gestionar las reservas, citas y otras tareas de la empresa. Si el negocio tiene un gran número de clientes con los que es necesario concertar citas o hacer reservas, y para ello es necesario que varias personas tengan que dedicarse a gestionar esta labor, tener una app puede resultar muy útil. Los métodos tradicionales (como email o teléfono) a veces soportan errores e implican altos costes que se pueden evitar con una app. Por eso, estas apps son una buena solución para peluquerías, organismos públicos, centros de estética, centros de salud, etc.
App para aportar calidad
Automatizar y agilizar los procesos también puede beneficiar a los clientes. Esto mejorará su experiencia y hará que, la próxima vez que necesiten un producto o servicio, recurran al mismo negocio, creando así fidelidad. Algunos servicios extra que puede aportar una app pueden ser ofrecer descuentos exclusivos, un regalo al contratar un servicio o acceso a datos o documentos. Un ejemplo podría ser un gimnasio, puede crear una aplicación para que sus clientes lleven un control de los ejercicios que realizan y las calorías que estos suponen, facilitar a través de la app tablas de entrenamiento o los horarios de las clases.
App para tiendas online
Los negocios que trabajan digitalmente por medio de Internet suelen mejorar su productividad utilizando una app. Hoy en día, la mayor parte de los usuarios realizan sus compras a través de dispositivos móviles, por lo que disponer de una app para tu tienda online aporta una gran experiencia de usuario y ayudará a fidelizar a los clientes.
Es mucho más fácil e inmediato comprar mediante una aplicación, ya que los clientes pueden hacerlo en cualquier lugar solo con su móvil o tablet y conexión a Internet. Los procesos de pago son más simples, el cliente puede tener abierta su cuenta con todos sus datos y además, permite llevar un control de los pedidos y del estado de los mismos. En el caso de los supermercados, por ejemplo, disponer de una app que guarde los pedidos anteriores supone un gran beneficio para el usuario, ya que podrá hacer la compra mucho más rápido.
App para negocios que precisan geolocalización
Para aquellas empresas que precisan geolocalización de algún tipo, contar con una app resulta casi imprescindible. La geolocalización puede ser necesaria en diversas situaciones, por ejemplo, para empresas que tienen trabajadores que han de desplazarse, por ejemplo, en el transporte de mercancías valiosas o peligrosas, o para controlar a los empleados. Otro ejemplo sería para mejorar el rendimiento de los repartidores, por ejemplo, en el caso de restaurantes que envían comida a domicilio.
Como se puede ver, las apps pueden representar grandes ventajas para ciertos negocios y en algunos casos resultan imprescindibles. Si se tiene un negocio reflejado en alguno de estos casos, es una buen opción contar con una app de soporte para sus actividades.